gua, casi
imperceptibles al principio, se forman en varios sitios, se unen luego
en relumbrantes riachuelos, que serpentean en el fondo de diminutos
cauces fluviales que ellos mismos se han abierto y desaparecen de pronto
en una hendidura del hielo con una especie de queja de argentino sonido.
Aumentan o disminuyen, segun las oscilaciones de la temperatura. Si
cubre una nube la claridad del sol y enfria la atmosfera, apenas corren;
si el calor aumenta, los arroyos superficiales hacen como los torrentes:
arrastran consigo casquijo y arena para depositarlos en aluviones y
formar con ellos islotes y ribazos: al anochecer se calmaran y el frio
de la noche los congelara de nuevo.
Bajo los rayos calorificos que animan temporalmente el campo helado por
la fusion de la capa superficial, agitase tambien el conjunto de los
guijarros caidos de la pared vecina. Una escarpa de casquijo situada a
la orilla de un arroyuelo, se viene abajo en derrumbamientos parciales y
se sumerge en las grietas. En otra parte, piedras negruzcas diseminadas
por el ventisquero, absorben y concentran el calor, y perforando el
hielo que tienen debajo, lo llenan de agujerillos cilindricos. En
cambio, mas lejos, grandes montones de escombros y piedras grandes
impiden que penetre en la capa inferior el calor solar. Alrededor se
funde y se evapora el hielo y aquellas piedras llegan a formar pilares
que parecen crecer, brotando del suelo como columnas de marmol, hasta
que una por una acaban por debilitarse y romperse bajo el peso, y todos
los fragmentos que sostenian caen con estrepito para empezar al otro dia
igual evolucion. Mas encantadores son aun estos dramas pequenos de la
naturaleza inanimada, cuando toman parte en ellos animales o plantas.
Atraido por lo tibio del aire, acercase revoloteando la mariposa,
mientras la planta, caida con la tierra desmoronada desde lo alto de la
roca vecina, aprovecha el corto reposo de vida para arraigar otra vez y
ensenar al sol su ultima corola. En las costas polares, los navegantes
han visto toda una alfombra vegetal cubrir un alto acantilado, cuya cima
era de tierra y cuya base era el hielo.
CAPITULO XIII
#Los hacinamientos de rocas y los torrentes#
Todos esos fenomenos que se verifican diariamente parecen de poquisima
importancia para la historia de la tierra. ?Que representa,
efectivamente, el trabajo del ventisquero durante un dia de verano? Su
masa, que adelanta por continuo esfuerzo, apenas ha rec
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