ias semillas, hace que cada una, dado que acudan las necesarias
disposiciones, engendre a su semejante sin poderlo estorbar, y sin
equivocar las fuerzas respectivas de cada una de ellas, del mismo modo
el entendimiento humano, puestas las ocasiones y motivos necesarios para
obrar, produce los actos que corresponden a cada una de sus potencias: y
asi como a la imaginativa le toca formar imagenes de los objetos, al
ingenio combinarlos, a la memoria retenerlos, al juicio le pertenece
producir las primeras proposiciones que encierran las verdades
fundamentales de la razon, y lo executa como que esto es propio de su
intima y natural potencia. De lo dicho se deduce, que la queestion de las
_ideas innatas_, que inutilmente se trata en las Logicas de los
modernos, es importuna, porque conociendo y distinguiendose bien las
potencias mentales de sus actos, y viendo atentamente como estas cosas
se exercitan, se sabra lo que es innato y no lo es, y tambien lo que
puede ser provechoso averiguar en esta materia.
CAPITULO IV.
_De las cosas que acompanan a los actos del entendimiento._
[11] Si quando el hombre piensa no tuviese otro motivo para alcanzar la
verdad que el que le sugieren sus conocimientos, con solo cuidar de que
estos fuesen exactos y no confusos, adelantaria lo que permite la
condicion humana en el examen de ella; mas como junto con los actos del
entendimiento andan inseparables los afectos del animo, estos turban,
confunden, y aceleran las percepciones mentales, y, lo que es peor,
corrompen de mil maneras al juicio, por donde son ocasion de muchisimos
errores. Para evitar pues, los excesos que en esta parte cometemos los
hombres en la averiguacion de la verdad, conviene mostrar como los
afectos del animo concurren con el entendimiento, y alteran el buen
orden de sus operaciones: asunto que se toma de la _Moral_ para hacerlo
servir a la Logica.
[12] Al punto que en los organos de los sentidos se hace la impresion
del objeto, y la sensacion, se siente el animo agitado de dolor, o
deleyte. Por dolor se entiende aqui qualquiera molestia, de modo, que la
agitacion del animo va junta con gusto, complacencia, y satisfaccion,
que los Filosofos llaman _Deleyte_: o con molestia, disgusto, pena,
displicencia, que llaman _Dolor_. Por poca reflexion que haga qualquiera
con lo que le sucede quando percibe los objetos sensibles, vera que no
hay ninguno que no le mueva el animo con uno de los nombrados afectos:
bien que
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