as
apacibles de su vida, cuando de repente entreabrio los ojos
sobresaltado; e incorporose a medias lleno aun de ese estupor del que
se vuelve en si de improviso despues de un sueno profundo.
[Footnote 1: haria = 'it must have been.' See p. 5, note 2, and p.
26, note 1.]
En las rafagas del aire y confundido con los leves rumores de la
noche, creyo percibir un extrano rumor de voces delgadas, dulces y
misteriosas que hablaban entre si, reian o cantaban cada cual por su
parte y una cosa diferente, formando una algarabia tan ruidosa y
confusa como la de los pajaros que despiertan al primer rayo del sol
entre las frondas de una alameda.
Este extrano rumor solo se dejo oir un instante, y despues todo volvio
a quedar en silencio.
--Sin duda sonaba con las majaderias que nos refirio el zagal, exclamo
Garces restregandose los ojos con mucha calma, y en la firme
persuasion de que cuanto habia creido oir no era mas que esa vaga
huella del ensueno que queda, al despertar, en la imaginacion, como
queda en el oido la ultima cadencia de una melodia despues que ha
expirado temblando la ultima nota. Y dominado por la invencible
languidez que embargaba sus miembros, iba a reclinar de nuevo la
cabeza sobre el cesped, cuando torno a oir el eco distante de aquellas
misteriosas voces, que acompanandose del rumor del aire, del agua y de
las hojas, cantaban asi:
CORO
"El arquero que velaba en lo alto de la torre ha reclinado su pesada
cabeza en el muro.
"Al cazador furtivo que esperaba sorprender la res, lo ha sorprendido
el sueno.
"El pastor que aguarda el dia consultando las estrellas, duerme ahora
y dormira hasta el amanecer.
"Reina de las ondinas,[1] sigue nuestros pasos.
[Footnote 1: ondinas = 'undines.' Female water-sprites, without
souls. They form one branch of the elemental spirits (see p. 24,
note 2, and p. 47, note 1). Read Fouque's romantic novel entitled
_Undine_.]
"Ven a mecerte en las ramas de los sauces sobre el haz del agua.
"Ven a embriagarte con el perfume de las violetas que se abren entre
las sombras.
"Ven a gozar de la noche, que es el dia de los espiritus."
Mientras flotaban en el aire las suaves notas de aquella deliciosa
musica, Garces se mantuvo inmovil. Despues que se hubo desvanecido,
con mucha precaucion aparto un poco las ramas, y no sin experimentar
algun sobresalto vio aparecer las corzas que en tropel y salvando los
matorrales con ligereza increible unas vec
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