papa dijo lo que
no podia menos de decir.... Si, no podia menos de 51
decirlo: yo lo esperaba todos los dias....
Poco despues de estas palabras, la misma voz anadio con
zozobra:
[5] --Alguien viene tras de nosotros.
Saliendo de entre las adelfas, Pepe vio a dos personas
que se acercaban, y tocando las hojas de un tierno arbolito
que alli cerca habia, dijo en alta voz a su companera:
--No es conveniente aplicar la primera poda a los arboles
[10] jovenes como este hasta su completo arraigo. Los arboles
recien plantados no tienen vigor para soportar dicha operacion.
Tu bien sabes que las raices no pueden formarse sino por el
influjo de las hojas: asi es que si le quitas las hojas....
--iAh! Sr. D. Jose--exclamo el Penitenciario con
[15] franca risa, acercandose a los dos jovenes y haciendoles una
reverencia.--?Esta usted dando lecciones de horticultura?
_Insere nunc, Miliboee, piros, pone ordine vitis_, que dijo el gran
cantor de los trabajos del campo. Ingerta los perales, caro
Melibeo, arregla las parras.... ?Con que como estamos
[20] de salud, Sr. D. Jose?
El ingeniero y el canonigo se dieron las manos. Luego
este volviose, y senalando a un jovenzuelo que tras el venia,
dijo sonriendo:
--Tengo el gusto de presentar a usted a mi querido
[25] Jacintillo... una buena pieza... un tarambana, Sr. D. Jose.
IX
=La desavenencia sigue creciendo
y amenaza convertirse en discordia=
Junto a la negra sotana se destaco un sonrosado y fresco
rostro. Jacintito saludo a nuestro joven, no sin cierto
embarazo.
Era uno de esos chiquillos precoces a quienes la indulgente
[30] Universidad lanza antes de tiempo a las arduas luchas del
mundo, haciendoles creer que son hombres porque son 52
doctores. Tenia Jacintito semblante agraciado y carilleno,
con mejillas de rosa como una muchacha, y era rechoncho
de cuerpo, de estatura pequena, tirando un poco a pequenisima,
[5] y sin mas pelo de barba que el suave bozo que lo
anunciaba. Su edad excedia poco de los veinte anos.
Habiase educado desde la ninez bajo la direccion de su
excelente y discreto tio, con lo cual dicho se esta que el
tierno arbolito no se torcio al crecer. Una moral severa le
[10] mantenia co
|