ial, como si
fuera comida.
Otras veces, alineados en el banco, zumbaban horas enteras, imitando
al tranvia electrico. Los ruidos fuertes sacudian asimismo su inercia,
y corrian entonces, mordiendose la lengua y mugiendo, alrededor del
patio. Pero casi siempre estaban apagados en un sombrio letargo de
idiotismo, y pasaban todo el dia sentados en su banco, con las piernas
colgantes y quietas, empapando de glutinosa saliva el pantalon.
El mayor tenia doce anos y el menor, nueve. En todo su aspecto sucio y
desvalido se notaba la falta absoluta de un poco de cuidado maternal.
Esos cuatro idiotas, sin embargo, habian sido un dia el encanto de sus
padres. A los tres meses de casados, Mazzini y Berta orientaron su
estrecho amor de marido y mujer y mujer y marido hacia un porvenir
mucho mas vital: un hijo: ?Que mayor dicha para dos enamorados que esa
honrada consagracion de su carino, libertado ya del vil egoismo de un
mutuo amor sin fin ninguno y, lo que es peor para el amor mismo, sin
esperanzas posibles de renovacion?
Asi lo sintieron Mazzini y Berta, y cuando el hijo llego, a los
catorce meses de matrimonio, creyeron cumplida su felicidad. La
criatura crecio, bella y radiante, hasta que tuvo ano y medio. Pero en
el vigesimo mes sacudieronlo una noche convulsiones terribles, y a la
manana siguiente no conocia mas a sus padres. El medico lo examino con
esa atencion profesional que esta visiblemente buscando la causa del
mal, en las enfermedades de los padres.
Despues de algunos dias los miembros paralizados recobraron el
instinto; pero la inteligencia, el alma, aun el instinto, se habian
ido del todo; habia quedado profundamente idiota, baboso, colgante,
muerto para siempre sobre las rodillas de su madre.
--iHijo, mi hijo querido!--sollozaba esta, sobre aquella espantosa
ruina de su primogenito.
El padre, desolado, acompano al medico afuera.
--A usted se le puede decir; creo que es un caso perdido. Podra
mejorar, educarse en todo lo que permita su idiotismo, pero no
mas alla.
--iSi!... isi!...--asentia Mazzini.--Pero digame: ?Usted cree que es
herencia, que...?
--En cuanto a la herencia paterna, ya le dije lo que crei cuando vi a
su hijo. Respecto a la madre, hay alli un pulmon que no sopla bien. No
veo nada mas, pero hay un soplo un poco rudo. Hagala examinar bien.
Con el alma destrozada de remordimiento, Mazzini redoblo su amor a su
hijo, el pequeno idiota que pagaba los excesos del abuelo. Tuvo
asi
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